jueves, 11 de mayo de 2017

"Abogados de Vigo asesoran a «youtubers» de toda España para que no cometan delitos" (2017)

Título: Abogados de Vigo asesoran a «youtubers» de toda España para que no cometan delitos

Subtítulo: Lanzan una videoguía que revela trucos en 10.000 palabras para ser legal en la red social y evitar amenazas, insultos y fraudes

por E. V. Pita

Publicado el 9 de mayo del 2017 en La Voz de Galicia, edición Vigo, página local 1

Link: http://www.lavozdegalicia.es/noticia/vigo/vigo/2017/05/07/abogados-vigo-asesoran-youtubers-espana-cometan-delitosjairo-60000-seguidores-saco-tema-polemico-llamo-/0003_201705V7C1992.htm

Los bufetes de Vigo apuestan fuerte por una nueva rama de la profesión: el asesoramiento legal sobre nuevas tecnologías, más conocido como el legal tech. Un ejemplo son los abogados vigueses Bárbara Román y José Manuel Sendín, que acaban de lanzar la primera videoguía legal para youtubers. En 90 minutos y 10.000 palabras traducen al lenguaje de la calle la jerga legal de las redes sociales. Su socio, el abogado mallorquín Jorge Morrell, de Términos y Condiciones, aportó la parte experimental.Los youtubers son jóvenes creativos, muchos de ellos adolescentes, suben sus comentarios sobre su vida diaria o sus obras a un canal de YouTube con la esperanza de lanzar un vídeo viral, captar millones de suscriptores y hacerse ricos y famosos. Pero a veces se pasan de la raya y acaban sentados en el banquillo.

Esta iniciativa pionera denominada Las aventuras de un youtuber legal consta de diez vídeos que ayudan a los artistas digitales de toda España a evitar la comisión de delitos en las redes sociales, tales como piratear contenidos protegidos por derechos de propiedad intelectual, calumniar a usuarios, defraudar a Hacienda con sus ingresos de publicidad o grabar a transeúntes en la vía pública. Ya hay un youtuber condenado en Vigo por ser un troll.

El bufete que promueve esta videoguía, NoLegalTech, ya tiene varios casos en la mesa. Un youtuber acudió a ellos porque le robaron vídeos que había subido a la red. Otros no sabían que no podían usar imágenes o música registrada por los derechos de autor y les retiraron los vídeos. Otro llegó al juzgado varias veces por insultos y amenazas contra él.

«La gente se cree que porque salen en YouTube son figuras públicas y pueden ser objeto de vejaciones e insultos. Es importante conocer los límites entre la libertad de expresión y las injurias», advierte Bárbara Román.

Su socio vigués José Manuel Sendín explica que YouTube se ha convertido en una de las fórmulas de comunicación «más importantes del momento» ya que basta abrir un canal, tras unos pocos clicks en su web, y empezar a subir vídeos. Pero hay que consultar primero detalles como la edad mínima para empezar.

Una de las torpezas más comunes del usuario es firmar sin haberse leído las condiciones de la plataforma antes de abrir un canal. Hay un amplio catálogo de políticas que establecen lo que se puede subir a YouTube y lo que no. Por eso, algunos creadores se llevan la sorpresa cuando sus contenidos son censurados o incluso le cierran el canal. «Nadie se lee los términos y condiciones, dicen a todo que sí. El lenguaje es complicado pero nosotros hablamos en cristiano. Al menos, con esta videoguía tendrán más conocimientos para usar YouTube con responsabilidad», explica.

El bufete ha subido los diez vídeos didácticos al canal Términos y Condiciones, gestionado por su socio mallorquín. Para conocer las necesidades y el ciclo vital de este negocio, los abogados entrevistaron a tres youtubers vigueses: Lady Compostela, especializada en consejos para mantener la línea, el experto en videojuegos Brais y Jairo, un vloguero que hace crítica social.

Los consejos legales incluyen entrevistas y cuestionarios en lenguaje sencillo para que los usuarios entiendan los «complicados» términos legales. «Un youtuber de veinte años no va a acudir a un abogado que no le hable en su idioma», afirma Román.

El ciclo vital de un youtuber comprendería la apertura de la cuenta, el crecimiento de la audiencia de su canal hasta tener más repercusión, la toma de la decisión de unirse o no a las llamadas networks (empresas que ayudan a mejorar el posicionamiento) o cómo hacer correctamente vídeos con publicidad de un producto. Y hay que resolver el «complicado tema» de si las ganancias que se obtienen con las reproducciones o los bolos deben ser declaradas a Hacienda.

 Jairo, con 60.000 seguidores: «Si saco un tema polémico, llamo antes»

«Hola, legales. ¿Qué tal estáis?». Así empiezan los vídeos de Sendín y Román. El primero señala que «sabemos que un joven que tenga una duda lo último que se le va a ocurrir para solucionarla es acudir a un abogado, lo que presumiblemente hará será consultar en Google que, si bien tiene respuesta para todo, no siempre son correctas».Bárbara Román advierte en su último vídeo que, si tienes un problema, «no le puedes reclamar a YouTube por nada, ni si te hackean la cuenta ni si te pierden los dados porque así lo dice una cláusula. Debes reclamar en San Bruno, California».

En la videoguía entrevistan a tres youtubers vigueses para que les contasen sus experiencias. Los sometían a un cuestionario de verdadero o falso para saber cuánto saben ellos de las normas que rigen YouTube. El vigués Jairo (JairoVlogs), que tiene 59.656 seguidores, habló de los límites de la libertad de expresión y de la protección de los derechos de autor. «Si saco un tema polémico, primero llamo a mi abogado y le enseño el vídeo», señala.Recuerda que, por error, uno fue calificado para mayores de 18, lo que le hizo perder audiencia. También recibió críticas de otros usuarios: «Puedes decir lo que quieras pero tiene sus consecuencias. Llegas a mucha gente y mi moralidad es distinta a la de otros países. Y hay quien gana 5.000 dólares al día con contenido que no es suyo».

La residente en Vigo Andrea (lady_compostela) les informó de la posibilidad de hacer eventos gracias a la repercusión de sus vídeos. Otro local, Brais (misterbraves), les introdujo en el mundo de los gamers (aficionados a videojuegos).

Antonio Fernandes: «Un gallego lidera el hacking ético» (2017)

Título: Antonio Fernandes: «Un gallego lidera el hacking ético»

Publicado en el suplemento RED de La Voz de Galicia el 23 de abril del 2017

link: http://www.lavozdegalicia.es/noticia/extravozred/2017/04/23/antonio-fernandes-gallego-lidera-hacking-etico/0003_201704SR23P16991.htm

por E. V. Pita


A sus 17 años, este hacker juvenil vigués destapaba «agujeros» de seguridad en webs bancarias y luego les alertaba. Él y unos colegas recorrieron Vigo en coche y descubrieron atónitos que muchos hogares con el novedoso wifi no ponían contraseñas. Este «millennial» de 1981 es tecnólogo, experto en industria 4.0 y conciencia a las empresas sobre ciberataques.

El «evangelista de la transformación digital» Antonio Fernandes reflexiona sobre los riesgos de la industria 4.0 y del Internet de las Cosas. Acaba de aprobar un curso online del MIT sobre ciberseguridad y sigue de cerca el hacking ético, una tendencia asociada a empresas que hacen auditorías de seguridad. «Ahora se llaman así. Hacen como intentos de intrusión con mentalidad de hacker y aplican técnicas propias de los malvados, pero con permiso y a un precio justo», explica. Usted advirtió en una charla en la universidad sobre ciberseguridad del alto riesgo en las cosas intercomunicadas por Internet y los coches autónomos.

¿Esta es la era de la inseguridad informática?

Estamos viviendo una revolución tecnológica en todos los sentidos, en donde la Inteligencia Artificial y la automatización de procesos avanza cada día a paso de gigante. Quizá cuando hablamos de ciberseguridad, inconscientemente, pensamos en grandes servidores protegidos por grandes medidas tecnológicas supervisadas por ingenieros, pero la ciberseguridad es un asunto global, que implica a dispositivos como los móviles o las smart TV  o a personas de perfiles no técnicos como abogados o directores de departamentos que no eran tradicionalmente tecnológicos.El malware ya está infectando las industrias.

 ¿Qué amenaza a las empresas?

El malware, en todas sus formas, junto al phishing y el spam, son amenazas que día a día toda corporación esta sufriendo en mayor o menor medida. Y aunque algunos daños son fortuitos, infecciones de los sistemas y datos para conseguir rescates en forma de dinero, por ejemplo. Otros forman parte de ataques globales enmarcados en campañas organizadas por grupos de delincuentes patrocinados por  corporaciones o gobiernos extranjeros, con fines variados, pero ninguno altruista.

¿Existe el «hacker» bueno?

Un hacker es un apasionado por algo, y la pasión no es buena ni mala, es una cuestión más ética, de ahí el hacking ético. La época del «hacker romántico» que supera barreras técnicas porque puede y como reto ya ha pasado a la historia. Nuestros sistemas, datos e identidad pueden ser simplemente utilizados como vehículo para otro fin mas destructivo. La necesidad de transformación digital por parte de las organizaciones debe ir acompañada con planes específicos en esta área, para la protección y contingencia de sus activos tangibles e intangibles, siendo para mi la industria el sector más sensible, por la hiperconectividad de tecnologías no diseñadas para convivir en estos entornos.

¿Qué pasaría si un virus toma el control de un vehículo autónomo, aunque esto suene a un argumento de película?

Muchas más cosas de las que en un principio podríamos pensar. No solo podrían secuestrarnos el vehículo y pedir un rescate por su recuperación y uso, esto sería si cabe lo menos importante. Nuestras conversaciones podrían ser grabadas y nuestros movimientos (con el aprendizaje de hábitos que conlleva) aprendidos y registrados. En lo más extremo, podrían provocar un accidente para buscar la eliminación de los pasajeros y borrar toda huella de intervención externa antes de provocar un choque mortal.

¿Agencias de inteligencia extranjeras usan herramientas de «hacking» que podrían usarse en coches autónomos?

Hace un par de meses se filtró en Wikileaks documentación sobre algunas herramientas usadas por los servicios secretos estadounidenses de la que se puede concluir la infección de Smar TVs o el control de vehículos autónomos. Recientemente han surgido evidencias de que la inteligencia de Estados Unidos presuntamente ha penetrado en los sistemas bancarios swift de Oriente Medio en los últimos años, y son conocidos los grupos chinos y rusos dedicados al espionaje y manipulación de la información a nivel global.

Si el Internet de las Cosas sigue adelante y la nevera compra por Internet más leche, ¿qué riesgos vislumbra?

Cada día más nos adentramos en la «niebla tecnológica», miles de pequeños dispositivos con sensores y funciones remotas. Hoy por hoy, hablamos de mediacenters, pulseras que toman el pulso, controles en fábricas y empresas. Cada uno sumando y formando un ecosistema más completo y complejo para servirnos. En una sociedad en donde cada vez más la Big Data se está convirtiendo en piedra angular al tomar decisiones, sin duda la integridad, confidencialidad y disponibilidad de la información se hace más vital que nunca. Pensemos que mañana la Internet de las Cosas estará también compuesta con elementos médicos, dispositivos en nuestros cuerpos que permitirán una vida más larga y de mayor calidad. Los médicos tendrán que comunicarse con ellos, pero, ¿que pasaría si tuviera acceso cualquier malvado?

¿La cadena de bloques ( el «blockchain») es tan segura que podría desatascar el Internet de las Cosas y revolucionar el pago con dinero virtual?

El blockchain puede llegar a ser una revolución en muchos aspectos, como la democratización del dinero a través de las criptomonedas o su uso como tercero de confianza para la autenticación de contratos o documentos. Hablar de esta tecnología nos daría para un artículo entero nuevo, porque entra más en una dimensión social que tecnológica el uso de la misma.

¿Sería catastrófico que un virus se apoderase de drones y robots asesinos?

El daño de las armas militares siempre es catastrófico, el caso que me plantea de que tus propias armas se rebelen contra ti es un riesgo que existe y para el que tienen que existir contramedidas. A mí me preocupa más cuando se normalice el uso de drones autónomos civiles, para por ejemplo el reparto de mercancías, todos los posibles riesgos que pueden surgir de la convivencia con ellos.

¿Están las universidades trabajando en proyectos de ciberseguridad?

Más que nunca están involucradas en la ciberseguridad en todas sus vertientes. En el laboratorio de Inteligencia Artificial e Informática (CSAIL) del MIT, por ejemplo, están trabajando ya en la seguridad en computación cuántica (área que probablemente cambiará el paradigma de muchas realidades actuales incluidas algunas sobre criptografía) o desarrollando sistemas resilientes que se autocuran de vulnerabilidades. Sin ir mas lejos, la cátedra de ciberseguridad en Telecomunicaciones de la Universidad de Vigo desarrolla cursos y formación y programas de concienciación sobre seguridad de la información en colaboración con otros centros gallegos.

 ¿La sociedad basada en la informática tiene pies de barro por la inseguridad?

No, no, en absoluto. La tecnología es segura, si se gestiona adecuadamente. Digamos que en este mundo el eslabón más inseguro suele ser el ser humano [sonrisa].

¿Cómo está la situación en Galicia?

Queda mucho trabajo y concienciación. Una de las empresas de hacking ético más relevantes de España en estos momentos está dirigida y fundada por un gallego. Y hay mucha gente de Galicia en puestos relacionados con la ciberseguridad.