sábado, 25 de noviembre de 2017

"Ellas son las geek" (2017)

Ellas son las geek

TE VAN A CAMBIAR EL CHIP. Son pocas, pero defienden con pasión la seguridad en Internet. Animan a otras unirse a ellas contra los hackers. No te quedes en stand-by...

Texto original y actualizado:
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/yes/2017/11/18/geek/0003_201711SY18P18991.htm

Autor: E. V. PITA
Publicado el 18 de noviembre del 2017 en La Voz de Galicia, suplemento YES

Hay muchas tribus urbanas (góticas, vamps, punkis, hipsters, bloggers) y quizás entre las más desconocidas están las chicas geek. Son unas apasionadas de las máquinas y las computadoras, y aún, muy pocas. La más famosa, a nivel literario, es la heroína Lisbeth Salander, una hacker justiciera que usa su cibertalento para ayudar a un periodista en la saga Millenium. Pero en Galicia también hay un puñado de expertas en ciberseguridad, son las teleco que vigilan la Red. Lo suyo son los cacharros, los sensores y los cables. Cuando quedan para tomar café con sus amigas se les escapan chistes y palabrejas que parecen sacadas de un guion de la serie The Big Bang Theory. «Digo que estoy en stand-by, que debo cambiar el chip, actualizarme, resetearme, o que el antivirus de los niños me está fallando si los sacas del entorno», bromea la ingeniera Susana Rey, de A Coruña.

Ella y sus compañeras Silvia Serrano, y las viguesas Lucía Anta y Belén Pérez, se han unido para animar a otras chicas a sumarse a su oficio y mostrar su cibertalento a un mundo que lo necesita. «La tecnología es divertida y apasionante, pero hay mucho talento femenino desperdiciado», asegura Susana. Ella son parte de la Rede Galega de Ciberseguridade y quieren visibilizar la contribución femenina a la seguridad en el mundo virtual. «Lo único que hace falta es que Disney haga una película con una heroína que luche contra los hackers. ¡Nosotras somos las buenas!», defiende una. Belén Pérez aclara que no todos los hackers son delincuentes pese a la mala imagen que se tiene de ellos.


«De pequeña, todos me decían que de mayor tenía que ser enfermera, como mi madre, porque las carreras técnicas eran de chicos, no tenía ordenador ni Internet, pero en el instituto me entró curiosidad por la tecnología. Las chicas no deberían verlo como algo raro. A mí me apasiona, es algo con lo que estoy aprendiendo y me sorprende cada día», comparte Silvia, experta en redes de datos.

SU ARMA, HACER EQUIPO
Una prueba de su soledad en un mundo de máquinas y hombres es que Belén Pérez fue la única mujer en el reciente evento Hack & Beers de Vigo, que reunió a tecnólogos y hackers éticos. Era la coorganizadora. Ese día sus amigas no habían podido ir, pero, hace unas semanas, se encontró a Silvia y Susana en un congreso de ciberseguridad en León y las tres decidieron hacer un llamamiento para que las alumnas del instituto regresen a los pupitres de las escuelas de Telecomunicaciones: «Antes había tantos chicos como chicas y ahora ellas solo son un 20 %». Este oficio también incluye ramas como la gestión y el derecho, caso de la abogada viguesa Bárbara Román, que asesora a youtubers.

Saben que su profesión tiene futuro y que las empresas se rifan a las pocas geeks disponibles en Galicia, a las que reclutan para vigilar sus servidores. Ellas trabajan para firmas competidoras, pero, en caso de emergencia por un ataque masivo de los hackers, su arma de mujer más efectiva es la colaboración. «Somos las buenas pero pocas, y ellos son malos y están muy organizados. Para nuestra desgracia siempre atacan fuera del horario de oficina, un viernes por la tarde o el fin de semana. Si estás con los niños jugando en el parque o en mitad de la cena, sales corriendo a casa a por el portátil...», dice Susana. Todas recuerdan el ataque mundial del virus Wannacry hace unos meses. Son noches que pasan en vela con café, pizza, leyendo códigos y chateando con las amigas porque «el truco está en saber a quién preguntar».

 «Lo mejor de nuestro trabajo es la necesidad de mantenerse permanentemente actualizado e informado y los retos que supone la ciberseguridad. Quizás la peor parte es la complejidad que ello supone. Todavía hay que ser muy autodidacta. Aparecerán nuevos retos con el Internet de las Cosas», dice Silvia.«El espectro de ataques cada vez es mayor, y aquí ya no solo es reputación o dinero de las compañías, sino vidas humanas», advierte Belén.

Además de ser ingenieras de Telecomunicaciones, Susana Rey es máster en Seguridad de la Información y responsable de seguridad en R; su compañera Silvia Serrano tiene el certificado de ciberseguridad CCIE #55864. Lucía Anta es ingeniera de red y seguridad en otra empresa, en Balidea. Y Belén Pérez es ingeniera en Electrónica Industrial y Automática y CPN-23 del CCI (Centro de Ciberseguridad Industrial). Las geeks pisan fuerte.